La sala Aída Cartagena Portalatín de la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña, fue el receptáculo donde varias lumbreras de la letras, como el laureado poeta Mateo Morrison, Premio Nacional Literatura, dio un paseo literario resaltando decenas de obras escritas por grandes poetas nacionales e internacionales que inspiraron sus trabajos en la magestuosidad del mar, en la que destacó a Pablo Neruda, dilecto de Mejía Ortiz.
“Vitelio tiene mucho de ellos, pero con originalidad y estilo propio” expresó Mateo.
Dijo que si fuera a hacer un símil del juego de pelota y la obra de Vitelio, lo definiría de la siguiente manera: “si fuere lanzador ponchó en el primer ining a los tres bateadores. Si fuere un bateador, un jonrón por todo el center field”
Hizo esa comparación para destacar la profundidad de la obra.
El poeta Basilio Belliard, moderador de la ceremonia, mantuvo el escenario atento a la obra, leyendo con excelencia algunos de los poemas que contiene la obra de Mejía Ortiz.
El novelista, ensayista y gestor cultural Avelino Stanley, en una intervención propia de sus atributos literarios, destacó al autor en diferentes facetas.
El director de la Biblioteca, licenciado Rafael Peralta Romero, en un gran esfuerzo postoperatorio dio una mayor solemnidad al acto y tuvo a su cargo las palabras de bienvenida.
En acto hicieron acto de presencia los finos escritores Plinio Chahin, Marino Berigüete, Pedro Valdéz, José Del Monte y el sociólogo Wilfredo Lozano.
El acto adquirió su máximo esplendor cuando el cantautor Cheo Zorrilla le puso música al poema “Marinero, poema de la huida” que al finalizar provocó un aplauso de pie de los asistentes.
La ceremonia contó con la presencia de los representantes de las 6 franquicias del béisbol invernal, de la que el autor es presidente. Fernando Ravelo, (Tigres del Licey)Víctor García Sued, (Águilas Cibaeñas)Alfredo Acebal, (Gigantes del Cibao) Miguel Feris y José Mallén, (Estrellas Orientales)Jorge Sturla ( Toros del Este) y José Gómez (Escogido) dieron un espaldarazo a Mejía.
También Junior Noboa, comisionado de béisbol, Garibaldy Bautista, presidente del Comité Olímpico Dominicano, así como Edward Guzmán, gerente de la seguridad social, Juan Núñez presidente de la Federación de Béisbol hicieron acto de presencia.
Los editores deportivos Leo Colporan, de El Nacional, Héctor J Cruz del Listín Diario, también respaldaron la puesta en circulación de la obra.
Doña Mirtha Ortiz, con 91 años, madre de Vitelio Mejía le sorprendió con su presencia lo que hizo más emotivo el acto.
La también escritora de literatura infantil Marilyn Armenteros, el amor terrenal de Vitelio Mejía y sus hijos, Vitelio III, Penélope y Jesús, así como sus nietos Vitelio IV, Lorelle Marie, dieron sentido familiar al evento.
Estuvieron sus hermanos: Iván, Conchita, Mirtha y Santiago.