Los Tigres del Licey frenaron su racha de cuatro derrotas y a su vez detuvieron una corrida de tres victorias consecutivas de los Leones del Escogido al blanquearlos tres carreras por cero.
“Fue un partido importante. Pudimos fabricar carreras en un momento clave y pudimos aguantar la ofensiva contraria. Luego de perder cuatro días corridos, necesitábamos ganar y los muchachos vinieron e hicieron el trabajo”, expresó el capataz azul, José Offerman.
“Pudimos jugar un juego limpio. Para nadie es un secreto que los errores nos han hecho un poco de daño, pero en el día de hoy tuvimos jugando bastante bien defensivamente. Eso marca mucha diferencia” agregó.
El dirigente tres veces campeón destacó la parte mental y psicológica del trabajo de un manager cuando un equipo entra en una mala racha, situación en la que se encontraba el equipo azul antes de la blanqueada ante los Leones.
“Hay que tratar de dejarles saber a cada uno que tenemos que mantener la intensidad. Buscar la forma de tomar mejores turnos, turnos de calidad con tal de estar arriba en el marcador al final del partido y en el día de hoy pudimos hacer eso”, señaló.
El dirigente campeón afirmó que no se casa con un mismo orden ofensivo, sino que seguirá variando las piezas con tal de buscar el mejor match posible ante cada lanzador en cualquier partido. Además, valoró el buen ambiente de los jugadores que aceptan sin problemas estar o no estar en el lineup en un día específico.
“Estamos tratando de poner en la alineación el mejor matchup posible con tal de lograr el resultado deseado. Lo hacemos de esa manera, cuando el equipo no está pasando un buen momento uno debe hacer cambios, tratar de buscar la mejor pieza posible. Cada jugador es consciente de ello”, concluyó.
