El año pasado el novato dominicano Jasson Domínguez puso a gozar y a sufrir a los fanáticos.
En un abrir y cerrar de ojos conectó palos kilómetricos, pero de buenas a primera se lastimó.
Fue sometido a una operación tipo Tommy John.
En lugar de prepararse en el cajón de bateo para tomar turnos al bate en vivo – como tenían pautado hacer los también jardineros Aaron Judge, el dominicano Juan Soto y Alex Verdugo, el programa de Domínguez hasta ahora ha incluido hacer tiros desde una distancia de 60 pies, con la esperanza de comenzar a hacer swings secos sin pelota a principios de la próxima semana.
“Estoy emocionado de estar aquí para ver a los nuevos muchachos, ver cómo están trabajando en su primavera”, dijo Domínguez. “Sólo soy paciente. No estoy tratando de apurar nada, pero quiero volver pronto”.
Domínguez, de 21 años, se sometió a la cirugía el 20 de septiembre, poniendo fin a un emocionante debut de ocho juegos que incluyó cuatro jonrones, incluido un bambinazo por la banda contraria contra Justin Verlander de los Astros con su primer swing en las Mayores.Al igual que sus compañeros de equipo, Domínguez dijo que está emocionado por la oportunidad de jugar junto a Soto, quien fue adquirido desde los Padres en diciembre.
“Será increíble poder estar tan cerca suyo y aprender de él”, confesó Domínguez. “Será bueno para mí”.
Domínguez dijo que pasó la mayor parte del receso entre temporada rehabilitándose en Tampa. Los Yankees esperan que Domínguez esté listo para partidos en la Gran Carpa en algún momento del verano; el mánager Aaron Boone sugirió que Domínguez podría jugar en encuentros de rehabilitación de ligas menores en abril o mayo.
“Sé que puedo jugar aquí, pero también sé que hay mucho trabajo por hacer”, acotó Domínguez. “Tengo muchas cosas que aprender. Como dije antes, no estoy tratando de apresurar nada. Sólo estoy tomando mi tiempo, haciendo lo que tengo que hacer. Cuando llegue el momento, llegará”.
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